Convención de 1972

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Convención de 1972 2017-03-09T00:11:16+00:00

LA CONVENCION DE 1972

La «Convención para la protección del patrimonio mundial cultural y natural« fue aprobada en las 32 y 33 Sesiones Plenarias de la UNESCO en Noviembre de 1972. En la Convención se especifican los criterios que se siguen para que un monumento, un conjunto o un sitio pueda ser incluido en la Lista del Patrimonio Mundial.

El Comité considera que un bien posee Valor Universal Excepcional si cumple uno o más de los siguientes criterios. Por lo tanto, los bienes propuestos tendrán que:

  • (i) representar una obra maestra del genio creador humano;
  • (ii) atestiguar un intercambio de valores humanos considerable, durante un periodo concreto o en un área cultural del mundo determinada, en los ámbitos de la arquitectura o la tecnología, las artes monumentales, la planificación urbana o la creación de paisajes;
  • (iii) aportar un testimonio único, o al menos excepcional, sobre una tradición cultural o una civilización viva o desaparecida;
  • (iv) ser un ejemplo eminentemente representativo de un tipo de construcción o de conjunto arquitectónico o tecnológico, o de paisaje que ilustre uno o varios periodos significativos de la historia humana;
  • (v) ser un ejemplo destacado de formas tradicionales de asentamiento humano o de utilización de la tierra o del mar, representativas de una cultura (o de varias culturas), o de interacción del hombre con el medio, sobre todo cuando éste se ha vuelto vulnerable debido al impacto provocado por cambios irreversibles;
  • (vi) estar directa o materialmente asociado con acontecimientos o tradiciones vivas, ideas, creencias u obras artísticas y literarias que tengan una importancia universal excepcional. (El Comité considera que este criterio debería utilizarse preferentemente de modo conjunto con los otros criterios);
  • (vii) representar fenómenos naturales o áreas de belleza natural e importancia estética excepcionales;
  • (viii) ser ejemplos eminentemente representativos de las grandes fases de la historia de la tierra, incluido el testimonio de la vida, de procesos geológicos en curso en la evolución de las formas terrestres o de elementos geomórficos o fisiográficos significativos;
  • (ix) ser ejemplos eminentemente representativos de procesos ecológicos y biológicos en curso en la evolución y el desarrollo de los ecosistemas terrestres, acuáticos, costeros y marinos y las comunidades de vegetales y animales terrestres, acuáticos, costeros y marinos;
  • (x) contener los hábitats naturales más representativos y más importantes para la conservación in situ de la diversidad biológica, comprendidos aquellos en los que sobreviven especies amenazadas que tienen un Valor Universal Excepcional desde el punto de vista de la ciencia o de la conservación.

 

DIRECTRICES PARA LA APLICACION DE LA CONVENCION

Las Directrices Prácticas para la aplicación de la Convención del Patrimonio Mundial tienen por objeto facilitar la aplicación de la Convención para la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural ya que establecen los procedimientos relativos a:

a) la inscripción de bienes en la Lista del Patrimonio Mundial y en la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro;

b) la protección y la conservación de los bienes del Patrimonio Mundial;

c) la concesión de asistencia internacional en el marco del Fondo del Patrimonio Mundial; y

d) la movilización de apoyo nacional e internacional a favor de la Convención.

Las Directrices Prácticas son revisadas periódicamente para reflejar las decisiones del Comité del Patrimonio Mundial.

Version 2008: Texto en Inglés y en Francés

Version 2005: Texto en español